Hermanitoos. Otra vez Sofi desde las letras en su templo digital. El día de hoy vamos a saber juntos lo que significa vivir en un amor verdadero. Sobre todo se trabaja desde un vínculo o varios, sabiendo que el Padre Celestial jamás te abandonará y formando un equipo para que utilices ese don. Porque en realidad, el amor es un don. Un regalo de Dios que simplemente nace en nosotros. Él busca que amemos y que seamos amados, para llegar a ser felices. Así llegamos a ver cómo nos comportamos con los demás, sabiendo que al amar puedo ver eso tanto en mí como en las personas amadas.
Es un regalo, sí. Pero no se puede vivir en solitario, sino que la forma de vivirlo es en relación con otros. Es nuestra opción y nuestra elección vivir de esa manera, por eso tiene tantos rasgos a tomar en cuenta. Tienen que saber que el amor es paciente, es de servicio. No es irritable, como veo a muchos de nosotros en nuestra vida cotidiana. No tiene en cuenta cada dolor, cada mal que recibió del mundo. Todo lo soporta.
Vivir de esa manera puede ser posible con Jesús. Al ingresar en una comunidad, lo descubrimos este año, porque no estuvimos solos y de hecho, caminamos como hermanos. Aunque el gran desafío significó preguntarnos si queríamos realmente vivir así, tanto en el amor que damos como en recibir ese amor. Si bien a simple vista no existe una retribución, igual podemos amar y hacer la diferencia en este mundo que se ve tan hostil últimamente.
Ah, casi me olvido. También esto es el meditar de qué forma tratamos a los demás en nuestra vida todos los días y qué nos gustaría cambiar de este trato, porque vivir en este amor que nos enseña Jesús en ocasiones puede costar, pero si nosotros somos realmente con Él podemos ver la forma en que obra en nosotros, nuestro corazón va creciendo a límites que ni siquiera podríamos sospechar. Pero más adelante sabrán de qué estoy hablando...
Dios no hizo al hombre para que esté solo. Nos pide que caminemos juntos, como hermanos.
-Sofi
PCC Adrogué 2019.
Es un regalo, sí. Pero no se puede vivir en solitario, sino que la forma de vivirlo es en relación con otros. Es nuestra opción y nuestra elección vivir de esa manera, por eso tiene tantos rasgos a tomar en cuenta. Tienen que saber que el amor es paciente, es de servicio. No es irritable, como veo a muchos de nosotros en nuestra vida cotidiana. No tiene en cuenta cada dolor, cada mal que recibió del mundo. Todo lo soporta.
Vivir de esa manera puede ser posible con Jesús. Al ingresar en una comunidad, lo descubrimos este año, porque no estuvimos solos y de hecho, caminamos como hermanos. Aunque el gran desafío significó preguntarnos si queríamos realmente vivir así, tanto en el amor que damos como en recibir ese amor. Si bien a simple vista no existe una retribución, igual podemos amar y hacer la diferencia en este mundo que se ve tan hostil últimamente.
Ah, casi me olvido. También esto es el meditar de qué forma tratamos a los demás en nuestra vida todos los días y qué nos gustaría cambiar de este trato, porque vivir en este amor que nos enseña Jesús en ocasiones puede costar, pero si nosotros somos realmente con Él podemos ver la forma en que obra en nosotros, nuestro corazón va creciendo a límites que ni siquiera podríamos sospechar. Pero más adelante sabrán de qué estoy hablando...
Dios no hizo al hombre para que esté solo. Nos pide que caminemos juntos, como hermanos.
-Sofi
PCC Adrogué 2019.
Comentarios
Publicar un comentario